A veces se nos plantean preguntas a las que no queremos responder, huimos de la respuesta y del preguntador cual calamar escupiendo un chorro de tinta y encima nos autoconvencemos de que disimmulamos que te cagas....sabiendo que nuestra maniobra de distracción ha sido tan cutre como reveladora..... nos cegamos ante la principal revelación, aquella que habla de nosostros mismos, de lo que somos, de lo que no queremos ser, de los sentires, de los estares y malestares...como la tinta del calamar, al final se disipa la distracción y se nos pilla con el culo al aire y argumentamos que estamos cagando...echamos a correr y apenas nos hemos desplazado.....pues va a ser que queria que me trincaran con el culo al aire.
Pd: la piel necesita orearse.
lunes, 31 de diciembre de 2007
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7 comentarios:
Es cierto lo que dices, nos reflejamos en las preguntas y en las vivencias de los demás, y en ocasiones nos pillan a contra pie. Pero también es cierto que parece que siempre tienes que tener respuesta para todo o que incluso siempre tienes que contestar o salir al paso de todo el ruido de ambiente que existe. Reclamo el derecho al silencio y a no responder,tampoco hay que agobiarse por no saber qué decir, de hecho es lo más habitual, excepto para Ramoncín y Pilar Rahola que saben las respuestas de todo.
si es que somos lo que callamos.....que buena visión periférica que tienes jeje
yo me ciego con esa revelación. y después vuelvo a mi cueva a no hacerme preguntas
yo he salido tan preguntona como respondona.
Que razon tiene Arles somos lo que callamos. Me gustan vuestras neuronas frescas.
me gustan tus P.D
a.querejeta:lo jodio es que los silencios los carga el diablo. Este blog no es compartido, curro sola jeje.Gracias, el gusto es mio.
gabriela bruch: son la síntesis.Muchas gracias por la visita.
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