viernes, 21 de marzo de 2008

LENGUA VERSUS TRAMPA

Trataba de no morderse la lengua del mismo modo que lo hacía cuando cortaba con las tijeras de niña. Ayudarse con la lengua para arrebatarle las riendas al temor, era hacer trampa. Se condenaba por trazar la linea que separaba el apoyo de la exigencia. Es absurdo hacer un bocadillo de foigrass sin pan o comerse el pan y luego el unte o viceversa, su obsesión era la mezcla, resultados variables, condicionados por las formas. Sentada frente al abecedario hilaba imperfecciones buscando cuadraturas con sabor a café. Se rebozaba cada día en un nueva meta, lejos de reblandecerse, lejos de la extenuación, pero cerca, casi a tocar del terremoto de la decepción.
pd: hacer trampas mola y más con la lengua.

8 comentarios:

K209 dijo...

Hacer trampas con el corazón mientras te muerdes la lengua...qué bonita sensación esa.

ovario dijo...

no es con....es al....no es buena la sensación.

Fernando dijo...

mentirte a ti mismo...no sé no lo hacemos ya diariamente?..bueno no me hagas caso..besos...por cierto y sin querer molestar se lee un poco mal con el negro y el morado..o será mi vista?

ovario dijo...

si es que una no tiene ni gusto ni clase para las combinaciones....ni me quiero mentir ni me quiero esconder, no se si siempre lo bordo...
Un besote.

Jordi Roldán dijo...

Tu concentración de pensamientos en un escrito de 13 líneas (más o menos) es tan alta como una solución hipertónica

Hacer trampas mola la de dios, y con la lengua ni te digo

ovario dijo...

pues debo saber a rayos.....no se si son mejores los partos de la lengua o las preñeces del pensamiento...eso ( tuneao por mi ) lo dijo el manco.

Unknown dijo...

Por mucho y bien que utilices la lengua el temor seguir� all� a lo sumo que se puede aspirar es convivir con �l de la manera mas llevadera posible, quiz�s esa sea la meta aunque te decepcione.

Un optimista

ovario dijo...

mientras haya meta no habrá decepción.

Una desencantá